Cómo tener un vientre plano
Antiguamente, los vientres prominentes se disimulaban con apretadísimos corsés que dejaban prácticamente sin respiración a sus usuarias. Afortunadamente, mi abuela, que era muy poco aficionada a “enfajarse”, prefería métodos menos agresivos para conseguir tener un vientre plano.
Infusiones que desinflan:
En la mayoría de las ocasiones, la hinchazón del vientre se debe a una mala digestión de los alimentos. Mi abuela recomendaba en estos casos, terminar cada comida con una infusión de anís verde, hinojo y hierba Luisa, mezclados a partes iguales. Esta agradable infusión, además, evitaba los gases.
Duchas reductoras:
Las duchas escocesas, con agua caliente y fría, son también un buen remedio contra la hinchazón. Empieza dirigiendo un chorro de agua caliente alrededor de tu ombligo. Después de unos segundos repite la operación, pero esta vez con agua fría. Si practicas esta ducha a diario conseguirás un vientre más firme y una piel más suave.
Dieta antibarriga:
Una dieta equilibrada te ayudará a mantener un buen tipo y una buena salud. Para no hinchar el vientre, apúntate a los alimentos ricos en fibra, como las verduras hervidas y los cereales integrales. Evita los picantes, el té, el café, las bebidas gaseosas y el tabaco.